3 de marzo de 2014

La profecía de Cloostedd - Joseph Sheridan Le Fanu

Dicen que los clásicos nunca mueren, y eso es lo que les pasa a los personajes de esta novela de terror escrita mucho antes de que el cine usara las salpicaduras de sangre para transmitir el miedo al espectador. Joseph Sheridan Le Fanu hace de La profecía de Cloostedd un lienzo de naturalezas muertas, grises, caducas y ausentes. Sin vanaglorios ni demagogia el autor consigue que el lector entre en su mundo frío y gris. Sus descripciones de la naturaleza son el mayor valor de este libro, que teniendo una buena idea de trasfondo se pierde en sí mismo y obliga al lector a poner demasiado de sí para concluir una novela algo monótona y sin sortilegios.



La muerte de su esposa hizo que Le Fanu pusiera a los fantasmas como protagonistas de sus obras. En esta, La profecía de Cloostedd una madre y su hijo mueren ahogados en un tenebroso lago rodeado de selva. Al oscurantismo propio de la trama se unen detalladas escenas donde gobiernan el negro y el gris, sin color.

Mas la valía del argumento pronto deja de tener el tirón esperado. El tiempo transcurre lento y la pluma del autor camufla entre sus palabras apariciones de fantasmas, sueños de terror e historias que buscan el miedo psicológico, no con escenas grotescas, sino buscando la emoción de quien sigue las líneas de la novela.

Joseph Sheridan Le Fanu está considerado el padre de los maestros del terror del siglo XX. Un autor que hace de bisagra entre el suspense gótico y los autores más visuales que postergaron a la literatura más reciente. Un maestro del género, pero sobre todo un excelente relator de escenas capaz de introducir a quien lee sus escritos en un mundo de tinieblas del que solo se puede salir cerrando el libro, pero que permanecen en la mente ocultas en las sombras de una habitación a oscuras. Le Fanu consigue meter el miedo en el cuerpo y dibujar naturalezas asombrosas por la poca vida que transmiten. Un libro recomendable para quienes gustan del insomnio psicológico y no temen a las sombras.

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